17 de mayo de 2010

-Brit: Ausente Sin Permiso de Bruce Brown y Cliff Rathburn-


En el año 2002 Robert Kirkman empezaba a despuntar dentro del mundo del cómic y después de escribir las miniseries Superpatriot y Tech Jacket para Image Comics pronto llegarían las indispensables Invencible y Los Muertos Vivientes. Entre medias el guionista de apenas treinta años y original del estado de Kentucky aún tuvo tiempo para una creación más, Brit, una serie que seguía las directrices de Invencible apostando por un toque ligeramente más adulto pero respetando las pautas clásicas de sus historias de corte superheróico. La primera miniserie sobre el personaje, un veterano superhéroe indestructible e invulnerable convertido en la última línea de defensa de Estados Unidos cuando todo lo demás falla, se publicó con 2003 y le siguieron dos secuelas Brit: Muerte Fría y Brit: Rojo, Blanco, Negro y Azul. Las dos primeras miniseries fueron dibujadas por el compañero de Robert Kirkman, el artista Tony Moore, que sería sustituido en la tercera miniserie por Cliff Rathburn que ya se había encargado anteriormente del entintado de Invencible y del color de las portadas de Los Muertos Vivientes así como de los grises de las dos entregas anteriores de Brit. Después de ello Brit seguiría su andadura como serie regular, ejerciendo en este caso Robert Kirkman solamente como editor de la serie debido a su apretada agenda, relegando sus labores de guionista en Bruce Brown al que acompañaría Cliff Rathburn a los lápices y enmarcando la acción dentro del universo de Invencible.

Las tres miniseries originales de Image Comics, editadas en un primer momento en blanco y negro y coloreadas posteriormente por Val Staples, fueron publicadas en nuestro país hace unos años por Aleta Ediciones en un tomo único pasando en su momento totalmente desapercibido. Ahora, aprovechando el tirón que tiene Robert Kirkman entre los aficionados, Dolmen Editorial y Aleta Ediciones publican la continuación de la serie, el llamado volumen dos obra de Bruce Brown y Cliff Rathburn, en el mismo formato en que hemos podido ver editado Invencible en los últimos años y bajo el título de Brit: Ausente Sin Permiso. En estas nuevas historias Brit vuelve de su retiro para afrontar una vez más las misiones más difíciles encargadas a la Agencia Global de Defensa junto a su compañero, el androide Donald Ferguson, mientras intenta afrontar como puede el fracaso de su matrimonio. Pero algo no funciona bien y la invulnerabilidad de Brit no parece encontrarse en tan buena forma como de costumbre, lo que quedará demostrado después de su aparente muerte en una de sus rutinarias misiones. La ruda hermana pequeña del veterano superhéroe, Britney, convencida de que Brit sigue con vida comenzará una investigación que destapará una trama más grande de lo que nadie hubiese llegado a sospechar.


El Brit de Bruce Brown y Cliff Rathburn es todo un ejercicio de mimetismo, una fotocopia perfecta del Invencible de Robert Kirkman y Ryan Ottley en todos y cadauno de sus aspectos, desde el tono y estilo de los guiones de la actual serie emblema de Image Comics al dibujo casi clónico de las aventuras del superhéroe adolescente Mark Grayson que Ryan Ottley nos ha ofrecido número a número en la serie y del que Cliff Rathburn es un claro heredero. Tanto es así que resulta imposible de creer que Robert Kirkman no haya jugado un papel más activo en estas nuevas historias sobre el personaje y no haya, al menos, esbozado las pautas de la serie. Brit, al igual que la serie creada por Robert Kirkman y Cory Walker en 2003, resulta una propuesta entretenida y divertida que sabe combinar con inteligencia y fluidez el humor y la acción con una sútil pero marcada caracterización de personajes. Una serie que muestra un cariño especial por los cómics de superhéroes de corte clásico y que sabe lidiar con los tiempos que corren actualizando la figura del superhéroe desde la perspectiva fantástica e imaginaria del género, donde tienen cabida mundos paralelos, civilizaciones extraterrestres, dinosaurios y todo tipo de seres increíbles, sin tener que recurrir a la "tendencia oscurantista" en la que se encuentra inmersa el mainstream de las últimas decadas y sin avergonzarse, en ningún caso, del tipo de historias que cuenta.


El problema viene cuando nos percatamos de que Brit no es Invencible y que al copiar las virtudes y el estilo de esta convierte la propuesta fresca y original de un determinado autor en una simple tendencia, un sucedáneo capaz de engañar a nuestros sentidos, pero que en frío descubrimos que no aporta nada nuevo a lo que ya hemos podido ver con anterioridad. La galería de secundarios de Brit no resulta tan atractiva como la del cómic al que intenta imitar y, más aún, parecen una colección de caracteres descartados de la "serie madre". Algo que parece constatar los cameos de personajes como Inmortal, Cecil Stedman o el propio Invencible que, no obstante, se puede entender por el hecho de que Brit forme parte actualmente del llamado "kirkmanverso". Esto, en todo caso, no debería significar que Brit vea vetado su derecho a forjarse una identidad y personalidad en vez de limitarse simplemente a copiar las virtudes y el estilo de otras series. Las referencias propias del personaje presentes en las tres miniseries guionizadas por Robert Kirkman, que a fin de cuentas eran las que le daban su identidad a Brit, son aquí solapadas y ofuscadas por la nueva situación que deja el panorama de Image Comics. Brit, en definitiva, resulta una lectura agradable y entretenida que puede convertirse en un buen sustituto a falta de nuestra ración de Invencible pero que, por desgracia, carece de una seña de identidad propia.

Ver también:
-Invencible: Tres Son Multitud de Robert Kirkman y Ryan Ottley-
-Invencible: Mi Marciano Favorito de Robert Kirkman y Ryan Ottley-

-Los Muertos Vivientes: Creados Para Sufrir de Robert Kirkman y Charlie Adlard-


-El Asombroso Hombre-Lobo de Robert Kirkman y Jason Howard-

3 comentarios:

Osukaru dijo...

Entonces... Mejor leer la etapa original de Kirkman, no?.

Lamasthu dijo...

Es difícil de decir porque este Brit transpira el olor de Robert Kirkman desde lejos y, como ya he dicho, es casi una serie clónica de Invencible. Así que depende de si uno tiene mono de Invencible, porque aquí encontrará exactamente lo mismo, o no te interesa otra colección que a parte de los personajes y el buen rato no aporta nada nuevo. Otra razón para leer la serie sería por ver como Image va construyendo su propio universo. Pero para algo diferente y con un tono parecido yo prefiero Atomic Robo.

Osukaru dijo...

Oks!. ;)