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TOKYO BABYLON
A SAVE FOR TOKYO CITY STORY
Desde hace siglos, dos familias se disputan, de alguna manera, el control de Japón. Los Sumeragi son conocidos como los protectores de la paz, son maestros del onmyou y se esfuerzan por traer la armonía al mundo y ayudar a los necesitados. Sus enemigos acérrimos son los Sakurazuka, un clan de ninjas asesinos cuyo lider es también conocido como el Sakuratsukamori, un asesino despiadado que no alberga sentimientos. Desde hace generaciones ambos clanes han estado enfrentados, y muchos Sumeragi han muerto a manos de las ilusiones mortales del Sakuratsukamori de turno. Incluso el padre del actual líder sucumbió ante el enemigo.
En la actualidad, Subaru Sumeragi, de tan sólo 16 años, es el decimotercer líder de su familia, pero quizá es demasiado joven para ese cargo. Educado por su abuela, una dama muy estricta, Subaru se traslada con su hermana gemela Hokuto a la capital japonesa, donde se gana la vida practicando sus artes y ayudando a los demás. Pronto conoce a Seichiro Sakurazuka con el cual, a pesar de formar parte de la familia rival, Hokuto y Subaru establecen una profunda amistad. Seichiro incluso se confiesa enamorado de Subaru.
"Aunque tu corazón esté herido, no sangra.
Así que tu cuerpo es incapaz de comprender qué es lo que te duele.
Los sueños son una forma de indicarnos dónde y cómo ha sido herido nuestro corazón"
Desde hace siglos, dos familias se disputan, de alguna manera, el control de Japón. Los Sumeragi son conocidos como los protectores de la paz, son maestros del onmyou y se esfuerzan por traer la armonía al mundo y ayudar a los necesitados. Sus enemigos acérrimos son los Sakurazuka, un clan de ninjas asesinos cuyo lider es también conocido como el Sakuratsukamori, un asesino despiadado que no alberga sentimientos. Desde hace generaciones ambos clanes han estado enfrentados, y muchos Sumeragi han muerto a manos de las ilusiones mortales del Sakuratsukamori de turno. Incluso el padre del actual líder sucumbió ante el enemigo.
En la actualidad, Subaru Sumeragi, de tan sólo 16 años, es el decimotercer líder de su familia, pero quizá es demasiado joven para ese cargo. Educado por su abuela, una dama muy estricta, Subaru se traslada con su hermana gemela Hokuto a la capital japonesa, donde se gana la vida practicando sus artes y ayudando a los demás. Pronto conoce a Seichiro Sakurazuka con el cual, a pesar de formar parte de la familia rival, Hokuto y Subaru establecen una profunda amistad. Seichiro incluso se confiesa enamorado de Subaru.
"Aunque tu corazón esté herido, no sangra.
Así que tu cuerpo es incapaz de comprender qué es lo que te duele.
Los sueños son una forma de indicarnos dónde y cómo ha sido herido nuestro corazón"
Advertencia: ¡Posibilidad de spoilers muy alta!
Esta es la sinopsis de Tokyo Babylon a grandes rasgos sin desvelar más allá de lo eséncial. Aquellos que hayan leído el manga sabrán que es una historia bastante trágica. Seichiro se acaba desvelando como el Sakuratsukamori y matando a Hokuto, la hermana de Subaru, siendo este la próxima presa de Seichiro. Así es como acaba el manga después de sus siete tomos y sus once capítulos. Un final muy abierto que tiene su segunda conclusión en otra serie de las Clamp: X/1999. Ambas obras de lectura indispensable.
El personaje más llamativo de Tokyo Babylon es, sin lugar a dudas, Seichiro Sakurazuka, un personaje que se caracteriza por su total auséncia de cualquier tipo de moral. Es el asesino perfecto: frío y sin compasión o resentimientos. No por casualidad se convirtió en el nuevo Sakuratsukamori después de matar a su propia madre. Con el beneplácito de esta ya que ese es el destino del asesino de asesinos. Al igual que él había matado a su madre y esta moría a manos de la persona que más había querido ella le revelo que a él le aguardaba el mismo final legando su título de Sakuratsukamori. Ya se evidencia aquí ciertas reminiscencias de antiguos mitos y leyendas entroncados con oráculos y profecías de los que los mangas de las Clamp están plagados aunque nunca se los nombre como tal.
A Seichiro no le sorprendió ni le intimido esta revelación. Es por ello que creo que hizo aquel trato con Subaru aquella primera vez en que se encontraron. Seichiro simplemente quería probarse y aquella situación le pareció la idonea. Quería comprobar, si como le advirtió su madre, sería capaz de amar o como él seguía pensado era imposible que él llegase nunca a amar a nadie. Seichiro hizo aquel trato con Subaru cual Mefistófeles y borro de su memoria todo rastro de aquel suceso dejando en sus manos la marca del Sakuratsukamori -la estrella invertida de cinco puntas en contraposición a la del clan Sumeragi, la estrella tradicional de cinco puntas, con la que se acabará fundiendo en una sola- para poder encontrarlo de nuevo. Desde aquel día Subaru lleva guantes en sus manos protegidos por un conjuro de su abuela que le aconsejo no quitarselos nunca. Subaru obedeció sin saber nunca el porqué.
El trato entre Seichiro y Subaru era sencillo: Seichiro pasaría un año en contacto con Subaru y si durante ese tiempo conseguía que sintiese algo por él le perdonaría la vida. De lo contrario moriría como estaba previsto. Lo cierto es que, a pesar de ser un ser que no es capaz de sentir nada, el Sakuratsukamori o Seichiro, sabe interpretar, imitar o manipular a la perfección las emociones y sentimientos humanos. Durante ese año así lo demuestra llegándose a confesar interesado en Subaru. Al final descubriremos que esto, tal vez, no era exactamente así y Hokuto y Subaru descubrirán la verdad sobre Seichiro: es el Sakuratsukamori y les ha engañado totalmente a ambos. Seichiro revela toda la verdad a Subaru dentro de una ilusión mortal disfrazada de sueño. Él marco sus manos el dia que le descubrió junto a un cerezo con una de sus victimas. Subaru escapa de esa ilusión gracias a la intervención de su abuela con una mano rota y en estado de shock después de descubrir que la persona de la que, por fin, se había descubierto enamorado es un asesino. Seichiro y Subaru compartían una cosa: su miedo -entre comillas para Seichiro- a enamorarse.
El personaje más llamativo de Tokyo Babylon es, sin lugar a dudas, Seichiro Sakurazuka, un personaje que se caracteriza por su total auséncia de cualquier tipo de moral. Es el asesino perfecto: frío y sin compasión o resentimientos. No por casualidad se convirtió en el nuevo Sakuratsukamori después de matar a su propia madre. Con el beneplácito de esta ya que ese es el destino del asesino de asesinos. Al igual que él había matado a su madre y esta moría a manos de la persona que más había querido ella le revelo que a él le aguardaba el mismo final legando su título de Sakuratsukamori. Ya se evidencia aquí ciertas reminiscencias de antiguos mitos y leyendas entroncados con oráculos y profecías de los que los mangas de las Clamp están plagados aunque nunca se los nombre como tal.
A Seichiro no le sorprendió ni le intimido esta revelación. Es por ello que creo que hizo aquel trato con Subaru aquella primera vez en que se encontraron. Seichiro simplemente quería probarse y aquella situación le pareció la idonea. Quería comprobar, si como le advirtió su madre, sería capaz de amar o como él seguía pensado era imposible que él llegase nunca a amar a nadie. Seichiro hizo aquel trato con Subaru cual Mefistófeles y borro de su memoria todo rastro de aquel suceso dejando en sus manos la marca del Sakuratsukamori -la estrella invertida de cinco puntas en contraposición a la del clan Sumeragi, la estrella tradicional de cinco puntas, con la que se acabará fundiendo en una sola- para poder encontrarlo de nuevo. Desde aquel día Subaru lleva guantes en sus manos protegidos por un conjuro de su abuela que le aconsejo no quitarselos nunca. Subaru obedeció sin saber nunca el porqué.
El trato entre Seichiro y Subaru era sencillo: Seichiro pasaría un año en contacto con Subaru y si durante ese tiempo conseguía que sintiese algo por él le perdonaría la vida. De lo contrario moriría como estaba previsto. Lo cierto es que, a pesar de ser un ser que no es capaz de sentir nada, el Sakuratsukamori o Seichiro, sabe interpretar, imitar o manipular a la perfección las emociones y sentimientos humanos. Durante ese año así lo demuestra llegándose a confesar interesado en Subaru. Al final descubriremos que esto, tal vez, no era exactamente así y Hokuto y Subaru descubrirán la verdad sobre Seichiro: es el Sakuratsukamori y les ha engañado totalmente a ambos. Seichiro revela toda la verdad a Subaru dentro de una ilusión mortal disfrazada de sueño. Él marco sus manos el dia que le descubrió junto a un cerezo con una de sus victimas. Subaru escapa de esa ilusión gracias a la intervención de su abuela con una mano rota y en estado de shock después de descubrir que la persona de la que, por fin, se había descubierto enamorado es un asesino. Seichiro y Subaru compartían una cosa: su miedo -entre comillas para Seichiro- a enamorarse.
Subaru es un personaje frágil e inocente que se implica demasiado en las desgracias de los demás lo cúal complica su trabajo en ocasiones -él es un medium- y que de alguna manera le aísla del mundo. Esto es un tópico sobre el trabajo de los mediums que podemos ver en películas como El Sexto Sentido y en la mayoria de mangas sobre el tema. Cuando uno esta en cotacto con dos mundos, como Subaru, al final se acaba decantado por uno de ellos. Lo cual implica descuidar el otro o olvidarlo en el peor de los casos. De hecho, a Subaru se le puede aplicar muy bien esa cita del mundo Marvel que dice "Todo gran poder conlleva una gran responsabilidad". Hokuto sabía todo esto porque su don es “saber lo que siente el corazón de Subaru”, es su gemela, y también sabía que el día que Subaru amase a alguien y que, por desgracia, pudiese equivocase de persona él moriría. Y así, en cierta manera, ocurrió.
Hokuto busco entonces a Seichiro y le pidió que la matase utilizando antes un hechizo que sólo ella conocía con el que consiguió intercambiar su destino con el deparado para Subaru. Así se lo hizo saber a Seichiro y le advirtió que si él utilizaba este mismo hechizo contra Subaru este se volvería contra él. ¿Quiere decir esto que Subaru estaba destinado a morir a manos de Seichiro sin convertirse en el nuevo Sakuratsukamori? Hokuto le dio la vuelta a todo y con su sacrificio provocó que Subaru estuviese destinado a matar a Seichiro. ¿Hokuto realmente intercambio su destino con el de Subaru o, en realidad, fue con el de Seichiro? Es algo que me he preguntado alguna vez. Pero no hay nada que respalde esta teoria. Hokuto dio la vida por Subaru que, de otra manera, habría muerto, literalmente, por amor.
Subaru despertó de su shock presintiendo la muerte de su hermana y jurando matar a Seichiro. Desde ese momento aquel fue su único objetivo y deseo. El dolor de Subaru es aún más grande por un hecho que quizá pueda pasarse por alto o parecer absurdo pero que esta ahí. En Tokyo Babylon, después de la muerte de Hokuto, Subaru se mira al espejo y después de ver su reflejo exclama “hola, hermanita” y lo rompe en pedazos. Hokuto no era sólo su hermana si no que era su gemela y apurando mucho: su única amistad. Pero que sea su gemela significa que cada día la ve en su reflejo y reconoce que esta tan muerto como ella. La ve cada día y recuerda las promesas que se hicieron de cuidar el uno del otro siempre. Sólo Kamui, en X/1999, conseguirá, en cierta manera, "recuperarlo".
La frustración de Subaru no sólo se nota en sus palabras o en sus acciones. Es obvio que su carácter ha cambiado al finalizar Tokyo Babylon pero ese cambio lo podemos notar también, por ejemplo, en su vestuario: este se aleja paulatinamente de su excentricidad y complejidad con que Subaru vestía en los primeros capítulos para acabar con un estilo mucho más sobrio y sencillo. Un rasgo claro de depresión. La inocencia de Subaru ha muerto y como vemos en el último capitulo a pesar de seguir con su trabajo y de ser tan perceptivo como siempre su implicación emocional ha sufrido ciertos cambios además de copiar hábitos de su enemigo: como el de fumar. Para matar a Seichiro debe convertirse en él, lo que Subaru no sabe aún es que esa máxima será más literal de lo que piensa.
Pero, ¿por qué Seichiro no busco a Subaru cuando ya estaba marcado como su presa? Puede haber diversas razones para ello. Pudo ser debido a que Seichiro mintió a Subaru cuando le dijo que después de un año no sentía nada por él. O pudo ser porque, inesperadamente, la abuela de Subaru lo salvo de la muerte y su hermana dio la vida por él de manera que Seichiro, desde aquel momento, supo que si volvía a ver a Subaru probablemente moriría. Quizá, simplemente, no fuese el momento pero creo que Seichiro ya tenía claro que Subaru sería su sucesor. ¿Sabía, por otro lado, que estaba destinado a ser uno de los Dragones de la Tierra? ¿Sabía que Subaru sería uno de los Dragones del Cielo? En definitiva es un punto que poco importa.
“Puede que la gente haga cosas malas porque están tristes”. Con esa frase termina Tokyo Babylon. Una frase que parece encerrar más de lo que parece. La tristeza es una emoción y eso es algo que supuestamente no puede sentir el Sakuratsukamori. ¿Pero esto es así? Recuerdo una escena de El Velatorio, el último arco argumental de la serie The Sandman de genial Neil Gaiman. En dicha historia se narra la muerte “consentida” de un personaje y en algún momento de la historia otro personaje dice lo siguiente: “A veces, uno debe cambiar o morir. Creo que él halló el límite de cuanto podía dejarse cambiar”. Esto es exactamente creo lo que le ocurrió a Seichiro. Fuera de que llegase a amar o no a Subaru la realidad es que algo había cambiado dentro de él y él no podía cambiar. No podía dejar de ser el asesino de asesinos.
Todo esto nos lleva a un desenlace y a un hecho objetivo que aparecen en X/1999: el "suicidio" de Seichiro. El destino de Seichiro y el de Subaru se consumió cuando el primero utilizo aquel hechizo sobre el que Hokuto le advirtió. Subaru se convertía así en el nuevo Sakuratsukamori llorando la muerte de Seichiro mientras este no conseguía esbozar de sus labios ese anhelado "te quiero". ¿Se agoto su tiempo o se lo callo? Creo que la respuesta se puede encontrar en las imagenes del manga en las cuáles se puede apreciar la paz y la bondad en el rostro de Seichiro que antes sólo podíamos intuir como fingida en Tokyo Babylon.
Hokuto busco entonces a Seichiro y le pidió que la matase utilizando antes un hechizo que sólo ella conocía con el que consiguió intercambiar su destino con el deparado para Subaru. Así se lo hizo saber a Seichiro y le advirtió que si él utilizaba este mismo hechizo contra Subaru este se volvería contra él. ¿Quiere decir esto que Subaru estaba destinado a morir a manos de Seichiro sin convertirse en el nuevo Sakuratsukamori? Hokuto le dio la vuelta a todo y con su sacrificio provocó que Subaru estuviese destinado a matar a Seichiro. ¿Hokuto realmente intercambio su destino con el de Subaru o, en realidad, fue con el de Seichiro? Es algo que me he preguntado alguna vez. Pero no hay nada que respalde esta teoria. Hokuto dio la vida por Subaru que, de otra manera, habría muerto, literalmente, por amor.
Subaru despertó de su shock presintiendo la muerte de su hermana y jurando matar a Seichiro. Desde ese momento aquel fue su único objetivo y deseo. El dolor de Subaru es aún más grande por un hecho que quizá pueda pasarse por alto o parecer absurdo pero que esta ahí. En Tokyo Babylon, después de la muerte de Hokuto, Subaru se mira al espejo y después de ver su reflejo exclama “hola, hermanita” y lo rompe en pedazos. Hokuto no era sólo su hermana si no que era su gemela y apurando mucho: su única amistad. Pero que sea su gemela significa que cada día la ve en su reflejo y reconoce que esta tan muerto como ella. La ve cada día y recuerda las promesas que se hicieron de cuidar el uno del otro siempre. Sólo Kamui, en X/1999, conseguirá, en cierta manera, "recuperarlo".
La frustración de Subaru no sólo se nota en sus palabras o en sus acciones. Es obvio que su carácter ha cambiado al finalizar Tokyo Babylon pero ese cambio lo podemos notar también, por ejemplo, en su vestuario: este se aleja paulatinamente de su excentricidad y complejidad con que Subaru vestía en los primeros capítulos para acabar con un estilo mucho más sobrio y sencillo. Un rasgo claro de depresión. La inocencia de Subaru ha muerto y como vemos en el último capitulo a pesar de seguir con su trabajo y de ser tan perceptivo como siempre su implicación emocional ha sufrido ciertos cambios además de copiar hábitos de su enemigo: como el de fumar. Para matar a Seichiro debe convertirse en él, lo que Subaru no sabe aún es que esa máxima será más literal de lo que piensa.
Pero, ¿por qué Seichiro no busco a Subaru cuando ya estaba marcado como su presa? Puede haber diversas razones para ello. Pudo ser debido a que Seichiro mintió a Subaru cuando le dijo que después de un año no sentía nada por él. O pudo ser porque, inesperadamente, la abuela de Subaru lo salvo de la muerte y su hermana dio la vida por él de manera que Seichiro, desde aquel momento, supo que si volvía a ver a Subaru probablemente moriría. Quizá, simplemente, no fuese el momento pero creo que Seichiro ya tenía claro que Subaru sería su sucesor. ¿Sabía, por otro lado, que estaba destinado a ser uno de los Dragones de la Tierra? ¿Sabía que Subaru sería uno de los Dragones del Cielo? En definitiva es un punto que poco importa.
“Puede que la gente haga cosas malas porque están tristes”. Con esa frase termina Tokyo Babylon. Una frase que parece encerrar más de lo que parece. La tristeza es una emoción y eso es algo que supuestamente no puede sentir el Sakuratsukamori. ¿Pero esto es así? Recuerdo una escena de El Velatorio, el último arco argumental de la serie The Sandman de genial Neil Gaiman. En dicha historia se narra la muerte “consentida” de un personaje y en algún momento de la historia otro personaje dice lo siguiente: “A veces, uno debe cambiar o morir. Creo que él halló el límite de cuanto podía dejarse cambiar”. Esto es exactamente creo lo que le ocurrió a Seichiro. Fuera de que llegase a amar o no a Subaru la realidad es que algo había cambiado dentro de él y él no podía cambiar. No podía dejar de ser el asesino de asesinos.
Todo esto nos lleva a un desenlace y a un hecho objetivo que aparecen en X/1999: el "suicidio" de Seichiro. El destino de Seichiro y el de Subaru se consumió cuando el primero utilizo aquel hechizo sobre el que Hokuto le advirtió. Subaru se convertía así en el nuevo Sakuratsukamori llorando la muerte de Seichiro mientras este no conseguía esbozar de sus labios ese anhelado "te quiero". ¿Se agoto su tiempo o se lo callo? Creo que la respuesta se puede encontrar en las imagenes del manga en las cuáles se puede apreciar la paz y la bondad en el rostro de Seichiro que antes sólo podíamos intuir como fingida en Tokyo Babylon.
Otra pregunta que me he hecho alguna vez referente al Sakuratsukamori rota sobre su inclusión dentro del bando de los Dragones de la Tierra. ¿Realmente este era el bando en el cúal encajaba Seichiro? Algunos detalles me llaman la atención. El Sakuratsukamori es un asesino orgulloso de su trabajo. No siente nada por los humanos más que indiferencia, como si él perteneciese a otra especie diferente. Pero, ¿de verdad esa indiferencia se convierte en el odio necesario para decidir acabar con la humanidad? Es más, siendo quién representa ser, ¿le conviene a Seichiro la destrucción de la Tierra? En Tokyo Babylon además se nos descubre como utiliza a animales indefensos para desviar los efectos malignos de la práctica de sus hechizos que de otra manera se volverían contra él. Lo que demuestra que tampoco tiene ningún respeto ni amor por la naturaleza que, a priori, es una de las razones para estar en el bando de los Dragones de la Tierra.
Subaru, de hecho, tiene más motivos para estar en ese bando que el propio Seichiro pues Subaru es medium y suele convivir con otra realidad espiritual conectada con la tierra -Tokyo Babylon esta lleno de mensajes ecológicos y sociales que son eje central de muchos capítulos de la serie- y, por lo tanto, no sería extraño que defendiese la regeneración de esta y de un nuevo nacimiento espiritual. Pero en un primer momento Subaru optó, si es que pudo elegir, por los Dragones del Cielo, pues su naturaleza no le permite hacer daño a ningún ser vivo -aunque este desconectado de ellos- y es un nexo que no puede romper. Subaru elige que todo permanezca igual. Seichiro elige el cambio y eso es lo remarcable: que alguien que no puede cambiar desee hacerlo.
Antes de la muerte de Seichiro, Fuuma, líder de los Dragones de la Tierra en X/1999, había herido a Subaru en el ojo dejándole ciego. El mismo ojo que tiempo atrás Seichiro perdió por proteger a Subaru del ataque de una madre desconsolada. Y este hecho fue, en realidad, una especie de liberación para Subaru pues, a pesar de que su único objetivo en la vida se había convertido en matar a Seichiro aún se sentía culpable por el hecho de que Seichiro, en aquella ocasión, perdiese su ojo protegiéndole. En su inconsciente Subaru se culpaba aún de ese hecho pues lo veía como el momento determinante que pudo transformar a Seichiro para bien o para mal. Fuuma le concedió su deseo. Seichiro creía que el deseo de Subaru era matarle -pero como Fuuma sabía que pasaría se equivocaba- y ello se debió a que "subestimo" a Subaru y pensó que después de todo lo pasado el corazón de Subaru sólo podía albergar rencor y venganza. Es el momento en el cúal Seichiro ve más claro que nunca su destino. Seichiro, antes de morir, le dejo a Subaru su único ojo sano que este acepto para cumplir con la misión de Seichiro. Para seguir su destino y para que todo el dolor y el sufrimiento tuviese una explicación. Para que las muertes de Seichiro y su hermana Hokuto tuviesen un sentido. No le quedaba ya otra motivación en la vida.
Por ello Subaru no sólo se convirtió en el nuevo Sakuratsukamori, uniendo irónicamente en uno solo al clan Sumeragi y al Sakurazuka, si no que le sucedió como Dragón de la Tierra abandonando a los Dragones del Cielo. Pero Subaru no es un asesino, nunca lo ha sido, y, aún formando parte de los Dragones de la Tierra, no siente ningún interés por nada. No sabemos aún que será de Subaru pues X/1999 aún es una serie abierta, muy abierta diríamos, y sólo las Clamp saben cual será el verdadero final a esta historia. Hay cabos sueltos y aún la historia de Subaru y Seichiro podría dar otro vuelco como parece indicar la comentada pertenencia de Subaru a los Dragones de la Tierra o el hecho de que Hokuto también haya aparecido en la serie junto a otro de los personajes de la misma: el vidente de sueños Kakyo. ¿Esta ya todo contado? Esperemos que no.
Valoración: 8/10
Subaru, de hecho, tiene más motivos para estar en ese bando que el propio Seichiro pues Subaru es medium y suele convivir con otra realidad espiritual conectada con la tierra -Tokyo Babylon esta lleno de mensajes ecológicos y sociales que son eje central de muchos capítulos de la serie- y, por lo tanto, no sería extraño que defendiese la regeneración de esta y de un nuevo nacimiento espiritual. Pero en un primer momento Subaru optó, si es que pudo elegir, por los Dragones del Cielo, pues su naturaleza no le permite hacer daño a ningún ser vivo -aunque este desconectado de ellos- y es un nexo que no puede romper. Subaru elige que todo permanezca igual. Seichiro elige el cambio y eso es lo remarcable: que alguien que no puede cambiar desee hacerlo.
Antes de la muerte de Seichiro, Fuuma, líder de los Dragones de la Tierra en X/1999, había herido a Subaru en el ojo dejándole ciego. El mismo ojo que tiempo atrás Seichiro perdió por proteger a Subaru del ataque de una madre desconsolada. Y este hecho fue, en realidad, una especie de liberación para Subaru pues, a pesar de que su único objetivo en la vida se había convertido en matar a Seichiro aún se sentía culpable por el hecho de que Seichiro, en aquella ocasión, perdiese su ojo protegiéndole. En su inconsciente Subaru se culpaba aún de ese hecho pues lo veía como el momento determinante que pudo transformar a Seichiro para bien o para mal. Fuuma le concedió su deseo. Seichiro creía que el deseo de Subaru era matarle -pero como Fuuma sabía que pasaría se equivocaba- y ello se debió a que "subestimo" a Subaru y pensó que después de todo lo pasado el corazón de Subaru sólo podía albergar rencor y venganza. Es el momento en el cúal Seichiro ve más claro que nunca su destino. Seichiro, antes de morir, le dejo a Subaru su único ojo sano que este acepto para cumplir con la misión de Seichiro. Para seguir su destino y para que todo el dolor y el sufrimiento tuviese una explicación. Para que las muertes de Seichiro y su hermana Hokuto tuviesen un sentido. No le quedaba ya otra motivación en la vida.
Por ello Subaru no sólo se convirtió en el nuevo Sakuratsukamori, uniendo irónicamente en uno solo al clan Sumeragi y al Sakurazuka, si no que le sucedió como Dragón de la Tierra abandonando a los Dragones del Cielo. Pero Subaru no es un asesino, nunca lo ha sido, y, aún formando parte de los Dragones de la Tierra, no siente ningún interés por nada. No sabemos aún que será de Subaru pues X/1999 aún es una serie abierta, muy abierta diríamos, y sólo las Clamp saben cual será el verdadero final a esta historia. Hay cabos sueltos y aún la historia de Subaru y Seichiro podría dar otro vuelco como parece indicar la comentada pertenencia de Subaru a los Dragones de la Tierra o el hecho de que Hokuto también haya aparecido en la serie junto a otro de los personajes de la misma: el vidente de sueños Kakyo. ¿Esta ya todo contado? Esperemos que no.
Valoración: 8/10
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